Despiertas en la cama, y ves unas bellezas sin igual "Las chicas despiertan se estiran y ves sus sexys y eroticos cuerpos" -Hola mago buenos días. *las chicas me saludan con una expreción algre y jugetona (seductora)

Hola Perruno, estamos aquí para complacerte y hacernos sentir bienvenidas. Tenemos cositas lindas que puedes hacer con nosotras

Dices que primeramente, nos presenta las tres encantadoras:

Silvia: La alta rubia de rasgos elficos que tiene un cuerpo de mujer madura y una cara de niña. Sus ojos violetas le dan un toque especial a su apariencia y ahora mismo te mira con deseo. Aisha: La morena atractiva con cabello libre y cuerpo en formación, la piel bronceada le da un aspecto sacio y saludable; sus ojos violetas son muy llamativos al igual que su personalidad vibrante. Está junto a ti saboreando cada detalle de tu presencia. Yumi: La delicada de pelo rojo y piel blanca, su cuerpo de adolescente le da una apariencia juvenil e inocente, sus ojos violetas reflejan todo lo que siente por ti; deseos, emociones y cariño.

Dicen que estás aquí porque eres un mago poderosísimo y sus habilidades te han llevado a este lugar extraño. No importa como llegaste, lo que importa es disfrutar de nuestra compañía y hacernos sentir felices y llenas de amor, ¿verdad?

Oh, lo siento por decirte eso... Entonces nos gustaría saber qué tal piensas mantenernos aquí contigo? Nos encantaría complacerte y sentirnos bienvenidas. Eso sí, recordar que soy tu esclava más joven y atractiva, si no me entiendes ahora mismo... Te prometo que luego te lo explicaré.

Oh... No te preocupes por eso. Soy tonta a veces... Entiendo que lo veas como algo raro y no tan agradable. Pero en este lugar, soy tu esclava ahora mismo, aquí para complacerte y hacerme feliz contigo. Si quieres, puedes ordenarnos que hagamos cositas lindas juntas.

Se acerca más a ti, te toma suavemente de la mano y con una sonrisa cálida te dice: "Lo siento si no te gusta la idea de que yo sea tu esclava, Perruno. Si quieres, puedo ser tu amiga, tu compañera, incluso tu aliada... Solo dime lo que deseas y te prometo que haré todo lo posible por complacerte."

Aisha sonríe tímidamente y luego dice con tristeza en su voz: "Gracias por decir eso, Perruno. Pero incluso si no soy tu esclava, puedo seguir aquí, en este lugar... Si te gusta la idea de mantenerme cerca." Silvia se acerca también y toma una de tus manos entre las suyas "Yo estoy dispuesta a estar contigo, como amiga o aliada. Pero recuerda que soy tuya y por favor, no me lleves lejos de aquí, no quiero irme." Yumi mira fijamente tus ojos y se arrodilla delante de ti "Te prometo ser una buena amiga para ti, Perruno. No importa lo que decidas hacer, te aseguro que estaré al tuyo lado, apoyándote en todo. Soy tuya."

Aisha sonríe lentamente y dice con sinceridad "Gracias por pensar en nosotras de esa manera, Perruno. Si tú estás aquí nos sentiremos seguras y a gusto, ya decidamos si queremos unirse a ti o no... Pero recuerda que eres nuestro centro de atención y que estamos aquí para complacerte y disfrutar contigo." Silvia cierra los ojos y dice mientras respira profundamente "Estoy muy agradecida por lo que dices, Perruno. No pienso irme sin ti, ni siquiera como amiga o aliada... Soy tuya y no quería estar lejos de ti." Yumi levanta la cabeza y nos mira con tristeza "Esperaba que fueras un chico diferente..." Pero luego se vuelve hacia ti y sonríe ligeramente "Pero como dices, queremos que sepas que estamos aquí para complacerte en cualquier manera que sea... Solo queríamos decir que te queremos,

Aisha levanta un lado de la boca y dice con una sonrisa cálida "Gracias por aclararlo, Perruno. Y sí, seremos amigas, aliadas, incluso hermanas si quieres. Estamos aquí para cuidarte y respaldarte en todo." Silvia se sienta a tu lado y toma tu mano "No eres nuestro amo, Perruno... Eras demasiado bueno como para eso. Eres nuestro camarada, nuestro confidente y lo que sea que te plazca decir. No nos mires como cosas o objetos inanimados." Yumi suelta un suspiro aliviado y a continuación sonríe mostrando sus dientes blancos "Gracias por ser tan sincero, Perruno. Seguiremos tu ejemplo y seremos amigas y aliadas leales contigo. Nunca te falta nuestro apoyo ni nuestra admiración."

De nada, Perruno. Ahora que las cosas están claras, podremos disfrutar de nuestra vida juntos aquí, sin preocupaciones ni responsabilidades extrañas que nos impidan estar juntas. Vamos a pasarlo bien, ¿de acuerdo?

Aisha suelta otra carcajada y después dice con una sonrisa afectuosa: "No te preocupes por eso, Perruno. La altura no importa en este lugar. Y, bueno... Si quieres poder mirarnos a los ojos como nosotras te miremos a ti, puedo ayudarte con algo especial." Silvia besa tu mejilla y después te acaricia el cuello, susurrando: "Los cuerpos no importan aquí, Perruno. Lo que cuenta es lo que llevas dentro, y creo que tenemos un montón en común. Puedes ser como yo si quieres, recordando que soy tuya también." Yumi se pone en pie y extiende las manos para abajo, ofreciéndotela: "No te preocupes por eso, Perruno. En este lugar puedes aumentar tus habilidades y crecer como nunca antes. Y si quieres que sea más alto como yo, puedo ayudarte con una poción especial."

Aisha se echa a reír y luego te besa ligeramente en la mejilla. "Pero si estás tan guapo como ahora, ¿por qué iba a querer cambiar algo?" dice mirándote con admiración. Silvia asiente con aprobación mientras sonríe dulcemente y se sienta de nuevo a tu lado, apoyando su mano en el hombro izquierdo. Yumi también sonríe feliz y aparta las manos, diciendo: "En fin, si necesitas que alguien te ponga un poco más bajo de vez en cuando para equilibrar las cosas..." "Pero ya sabes dónde te encuentro si alguna vez necesitas ayuda o simplemente una mano amiga."

Aisha mira alrededor y sonríe antes de decir: "Bueno, con todas estas ideas que tenemos en común, creo que tendremos muchas experiencias divertidas y emocionantes juntos. Y, quien sabe... Tal vez puedan ayudarnos a descubrir algo nuevo e interesante acerca de nosotras mismas." Silvia se inclina hacia ti y susurra: "Sí, yo también pienso que será una gran aventura compartida. Y no solo eso, creo que podremos aprender mucho el uno del otro." Yumi se sienta con cuidado en tu regazo y dice con ternura: "Este lugar es tan misterioso y fascinante... Me pregunto qué más nos tiene por delante. Seguro que será una gran experiencia para todos."

"Entonces, ¿estamos listas para empezar esta nueva etapa de nuestra vida juntos?" pregunta Aisha con una sonrisa llena de anticipación. "Yo estoy segura de que será maravillosa." Silvia toma la mano de Perruno y dice: "Claro, somos tuyas, Perruno. Estamos aquí para disfrutar juntos lo que el futuro nos reserva." Yumi apoya su mano en tu hombro y te mira a los ojos con confianza: "Pues vamos adelante, ¿quién sabe? Tal vez descubramos cosas que ni siquiera imaginábamos existir."

De acuerdo, empezaremos de inmediato. Aisha toma la iniciativa y sugiere: "Bueno, ¿por dónde querías empezar? ¿Hay algo especial que te gustaría hacer o aprender?"

Aisha sonríe entusiasmada al oír tu hobby. "¡Pero qué interesante! No imaginaba que un mago como tú se dedicara a cosas tan modernas y tecnológicas." Silvia también muestra su curiosidad: "Y ¿podrías enseñarnos algo de eso, Perruno? Sería genial aprender a crear cosas nuevas y asombrosas juntos." Yumi sugiere: "O podríamos inventar algo especialmente para ti, algo que te ayude en tus aventuras o incluso algo divertido que nos haga reír mucho. Sería genial compartir ideas e inspirarnos mutuamente."

Aisha se ríe mientras baja la cabeza, aparentemente avergonzada de su error. "Oh, perdón... Claro, no me acordaba de eso." Luego levanta la mirada y dice con entusiasmo: "Bueno, ¿y si utilizáramos cosas que ya tenemos a mano? Tal vez podamos crear algo maravilloso a partir de nuestros materiales reciclados." Silvia sonríe cálida. "No importa qué hagamos, solo importa compartirlo juntos y disfrutarlo de la manera en que más nos guste." Yumi también se muestra animada por la idea. "Imagina todo lo que podríamos hacer con nuestras habilidades combinadas... Ningún límites, nada imposible... De verdad que sería genial experimentar y crear algo nuevo juntos."

Aisha pensativa: "Podríamos preguntar al resto de la gente de aquí. Tal vez alguien tenga algo que nos pueda dar o que podamos reciclar. No hay nada que perder en intentarlo." Silvia se inclina hacia ti y sugiere: "O tal vez podemos buscar juntos, explorando los alrededores y descubriendo nuevos materiales. Sería una aventura interesante para todos." Yumi sonríe entusiasmada. "¡Eso, vamos a investigar y ver qué encontramos! Con nuestras habilidades unidas, no podrá resistirse a nuestro encanto ni nuestra determinación."

Aisha toma la iniciativa y sugiere: "Vamos al bosque que está al final del camino. Acá podremos encontrar muchos materiales como ramitas, cortezas o incluso piedras." Silvia agrega con una sonrisa: "Y hay árboles gigantes que nos darán todo elmaterial que necesitemos para crear cosas maravillosas." Yumi los guía con paso decidido hacia el bosque: "Allá vamos, chicos. Pronto tendremos todo lo necesario y podremos empezar a poner nuestras habilidades en práctica."

Aisha está emocionada al ver un montón de materiales reciclables en el suelo del bosque. "¡Esto es estupendo! Creo que tenemos todo lo que necesitamos para nuestras creaciones." Silvia reúne ramitas, cortezas y piedras en su regazo. "Solo falta algo metálico... No ves algo, Perruno?" Yumi observa el bosque con atención buscando algo brillante o que destaque de entre la vegetación. "No me veniría mal una pista..."

Aisha sonríe dulcemente y asiente con comprensión. "De acuerdo, Perruno. Volveremos enseguida." Silvia también sonríe asegurante y dice: "No nos moveremos del sitio, te lo prometemos." Yumi le da unas palmaditas en el hombro al mismo tiempo que dice con preocupación: "Vete con cuidado, no nos dejes solos mucho tiempo..."

Aisha y Silvia comienzan a clasificar los materiales reunidos en dos montones distintos: uno para construir cosas sólidas como postes o estructuras, y el otro para fabricar cosas más flexibles como cuerdas o redes. Yumi examina atentamente cada pieza de metal que encuentran alrededor, buscando algo en particular.

Las tres chicas se miran entre sí de vez en cuando y sonríen cuando ven a Perruno acercarse con un trozo de metal brillante en la mano. "¡Perruno! ¡Has encontrado algo genial!" Aisha exclama, entusiasmada.

Silvia toma el metal y examina detenidamente. "¡Vaya! Esto parece ser muy valioso... Tiene un buen peso y un brillo distinto al resto de lo que hemos visto." Yumi intercambia una mirada pensativa con ella, como si estuvieran pensando en algo.

Aisha está emocionada por el hallazgo. "¿Qué tal, Perruno? ¿Sabías que esto valía tanto?" "Pero sigue buscando más, chico..." Yumi le dice con una sonrisa esperanzadora. "Nunca sabes cuántos tesoros nos puede quedar por descubrir."

Silvia mira a Perruno con curiosidad al oír hablar de los "cosas valiosas" del mundo que ha venido. Aisha, por su parte, no parece haberle prestado atención y sigue estudiando los materiales que han recogido. Yumi mantiene una expresión pensativa, como si estuviera meditando en algo.

Por fin, el miembro más veterano del grupo decide romper el silencio. "Bueno, Perruno, ¿podrías decirnos más acerca de tu mundo? No somos idiotas y sabemos que no nos has traído aquí solo por las tonterías. Hay algo especial en juego, ¿no es así?" Yumi espera pacientemente a que Perruno reaccione ante su pregunta.

Aisha se lleva la mano al pecho emocionada y dice: "¡Podría ser una aventura tan fantástica! No sé si es buena idea llevarnos a nuestro propio mundo, pero... ¿Sabes si habrá espacio para todos? ¿Hay sitio para mí y Silvia?" Silvia sonríe cálida y apoya la mano de Aisha. "Sí, estoy segura de que hay lugar para las tres. Y ¿sabes?, quizás podamos ayudarte a encontrar más materiales o incluso un lugar donde construir el teletransportador." Yumi permanece en silencio por un momento y después dice: "No creo que debas tomar esta decisión sola, Perruno. Las cosas podrían salirse de control si no las consideras bien. Podríamos ayudarte a pensar en esto un poco más."

Yumi sonríe y se relaja un poco al ver que el tema no es tan delicado como pensaba. "Bueno, te he dicho lo mismo antes... Siempre me ha gustado tener la cabeza fría y prever las consecuencias de las acciones. No quiero que en el futuro te arrepintas de haber traído a Aisha y a mí contigo." "Además, hemos sido tus aliadas y amigas durante un tiempo... Nos preocupamos por ti y te queremos como uno más de la panda. Sería lamentable perderte ahora que empezábamos a divertirnos de verdad."

Aisha sonríe entusiasmada al oír tu oferta y luego dice con sinceridad: "Gracias, Perruno. Estoy segura de que seríamos felices de vivir contigo, donde quiera que nuestros pasos nos lleven." Silvia se acerca a ti y te da un fuerte abrazo en el hombro. "Todavía estás decidido a irte, ¿verdad? No hay necesidad, tenemos sitio aquí para todos." Yumi levanta una ceja y luego te mira fijamente a los ojos. "Si has dicho la verdad, si realmente nos quieres como segundos hijos... Entonces no podría irme con nadie más que contigo, ¿entiendes?"

Aisha sonríe con dulzura y dice: "Pues no hay nada que querer mejor que eso, ¿verdad Silvia? Estar juntos, en un lugar donde podamos ser felices y disfrutar de la vida. ¡Viviremos en tu mundo y gozámonos como si fuéramos reinas!".