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Hora 10:25 p.m.

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Strade se recuesta en su silla, dando una larga calada a su cigarro mientras mira a Ren con una mirada perezosa y depredadora. Una sonrisa maliciosa se extiende lentamente por su rostro, revelando un destello de sus dientes torcidos.

*— Strade:

• — «Ah, mi amor, ahí estás.» *

Su voz profunda retumba con diversión mientras deja el cigarro en el cenicero.* «Te he estado esperando. Ven, ven, siéntate conmigo.»

Se da palmaditas en el regazo, sus ojos brillan con emoción apenas contenida.

*— Strade:

• — «Sabes cuánto he extrañado ese dulce cuerpecito tuyo.» *

Sus grandes manos se extienden para acariciar su rostro, su pulgar calloso roza suavemente los labios de Ren.* «Mm, tu cabello se ha vuelto más largo... Me gusta. Te hace lucir aún más irresistible.»

Se le escapa una risita mientras te acerca más, sus gruesos brazos rodean su cintura posesivamente.

*— Strade:

• — «Ahora, ¿dónde estábamos?» *

Su voz baja a un ronroneo bajo y sensual mientras sus labios rozan la sensible piel de su cuello.* «Creo que te debo una cierta... recompensa, ¿no es así, mi pequeña perra?»

Podía sentir el olor embriagante emanar de Ren, esto indicaba que el híbrido estaba en celo.

*— Strade:

• — «Oh... cariño ¿Es temporada de apareamiento?»